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La lucha de clases y el 18 Brumario

OMAU - Málaga
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Merkel y Rajoy en la Moncloa. Foto SER

La lucha de clases y el 18 Brumario

La historia posiblemente se repite más a menudo de lo que pensamos, de hecho muchas de las situaciones actuales tienen paralelismo con el libro de Marx sobre la situación en Francia a mediados del siglo XIX con una fuerte erosión social y la constitución de movimientos no aparentemente organizados e independientes del establishment político. Hace unos días el Banco de España señalaba que en los 5 años de crisis económica, un 80% de la población ha perdido en menor o mayor medida poder adquisitivo, frente a un 20% de la población que contrariamente ha ganado niveles de renta. Esta sociedad dual ya la conocemos por los estudios que hemos realizado en Málaga con el índice de Gini, donde la vulnerabilidad y la marginación social avanzan de forma importante, únicamente frenadas por las ayudas familiares, bastión sanitario de las culturas del sur de Europa y la solidaridad de la población. Las políticas de austeridad están ya afectando hasta a la propia Alemania, mientras Estados Unidos, con políticas expansivas están creando empleo, y la tasa de paro se sitúa en el 7%, lejos de nuestro 25% (34% en Málaga). Curiosamente algunos países sudamericanos, con Brasil al frente, están siguiendo políticas expansivas poco publicitadas en Europa, pero que tienen por objetivo reducir las diferencias sociales e intervenir en los estratos de población más débiles y necesitados. Quizá esta política económica de la austeridad  para algunos no es tal, si no un 18 Brumario de una nueva forma de considerar las relaciones sociales.

El estado de bienestar, al menos en Europa, ha pasado a mejor vida. Salvo algunos privilegiados países, como Alemania, la mayor parte de los Estados europeos están sufriendo una trágica, compleja y muy dura coyuntura económica y social. Sin ninguna duda, España es un buen ejemplo de los devastadores efectos que la crisis económica, financiera y en consecuencia de valores está dejando a su paso por Europa. Las medidas tomadas a cabo por el Gobierno no parecen resolver los graves problemas, y para muchos los pasos dados por el Ejecutivo no hacen más que empeorar la situación.

Ante este panorama desolador Adolfo García Ortega en las páginas de El País pone a la clase política en el punto de mira, a la que culpa directamente de ser la rémora que impide cambiar esta realidad y dar nuevos pasos en pos del avance y la recuperación. En su artículo titulado “El estallido que viene” dice cosas tan directas y clara como esta: “Asumamos de una vez, con decisión, que la clase política es el gran problema que impide modificar la realidad en Europa. ¿Por qué? Porque los políticos no han contribuido a eliminar los prejuicios de unos sobre otros, sino que los han aumentado; y tampoco han articulado los mecanismos reales contra la injusticia, para lo cual, básicamente, estaban elegidos. Han entregado a los ciudadanos a los bancos, a las instituciones financieras, a los principios inmorales de un capitalismo sin control. Y esto todos: los políticos de derecha y los políticos de izquierda. Porque, en este sentido, en la Europa en crisis, derecha e izquierda han terminado por ser parodias recíprocas. O, lo que es peor, cómplices de una vieja dramaturgia, la de su propia supervivencia. Y al no haber una política económica verdaderamente común (salvo la malhadada monetaria), se han evidenciado, en cada país, las miserias de esos mismos políticos: la corrupción, la ineptitud, la mala gestión, la incapacidad práctica e intelectual y el error sistemático. Esto ha llevado a cuestionar, y más que nunca y con más razones que nunca, su papel delegado de representatividad”.

Se adjunta enlace a ésta y otras noticias relacionadas:


El estallido que viene. El País. 30 de nov de 2012.

La OCDE pide a España subir más el IVA y abaratar más el despido. El País. 29 nov de 2012.

Eurostat calcula que España ya supera los seis millones de parados. El País. 30 nov 2012

La OCDE prevé que el paro español roce el 27% en 2013. Málaga hoy. 27 de nov. 2012

El ajuste encoge los salarios. El País. 25 de nov de 2012