La nueva consideración de la Junta de Andalucía sobre las miles de viviendas construidas en suelo no urbanizable en la Axarquia es observada de forma diferente por diferentes medios. Hace escasamente un año se aprobó el PGOU de Marbella, donde de las decenas de miles de viviendas fuera de ordenación, finalmente la casi totalidad fueron legalizadas. Con independencia del lugar donde se produzca, la única cuestión comprobada es que donde llega la urbanización de la forma que sea, prácticamente nunca se recupera el paisaje original. En el planeamiento de la Costa del Sol ello es prácticamente un axioma, al igual que sucede con las zonas verdes y de equipamientos comunitarios, en las que a veces con extrema facilidad se ha cambiado su calificación por la de uso residencial. En sentido contrario todavía no se ha producido ninguna situación.

Artículos de La OPINION, y EL MUNDO (Ecologistas en Acción, Rafel Porras y Susana Villaverde).